martes, 21 de agosto de 2007

De ahora en adelante

Como prometí en entradas anteriores, aquí os presento la que será mi bici durante lo que esperemos sea un largo trecho. Vuelve a ser una QBikes, en concreto el modelo Empire, que lleva todo el año compitiendo de la mano de Michael Pascal y Damien Spagnolo entre otros.Todo ha sido un poco forzado, y puedo decir que me he dejado llevar haciendo algunos cambios, pero el resultado final merece la pena, aunque mi cuenta corriente esté temblando. No sólo es lo bonita que me ha quedado, sino lo bien que va.
Parece mentira como unas pequeñas modificaciones dan lugar a un cambio tan significativo. A simple vista, es mi bici antigua un poco renovada, estilizada, mejor acabada, pero cuando me la llevo a la montaña es más manejable, dócil y rápida. Además la he montado con el amortiguador Bos, que supuestamente fue creado para esta bici en concreto, y realmente lo parece. Es un amortiguador completamente diferente a todo lo que he probado hasta ahora (Fox Vanilla RC y 5.0, Romic). La primera impresión es que la bici es mas incómoda, porque los baches se notan mucho más, pero es increíblemente más rápida, y se mantiene pegada al suelo mucho mejor. Mucha máquina tengo ahora, lástima del piloto que la lleva, que no le va a sacar ni el 50% del rendimiento.
Aprovechare para comentar el fin de semana de curso con Oscar Saiz en GrandValira. ¿Sabéis aquello de si no lo veo no lo creo? Pues lo he visto. Parece realmente inhumano como este hombre puede negociar la curva más cerrada de un circuito, o como consigue pasar una curva contraperaltada como si fuera en asfalto. Compartí fin de semana con más de 20 personas (en su mayoría pixapins) en el que todos intentamos mejorar nuestras técnicas de conducción. Como es habitual en mí, poco aprendí. Esto de la bici no se me da bien del todo, y había demasiada información a asimilar, y muchas personas de quien aprender, tanto cosas buenas como malas. Acabé un poco decepcionado, no lo voy a negar, porque pienso que no he aprovechado tanto talento junto, pero las siguientes veces que he vuelto a la montaña desde entonces, las curvas parecen más abiertas, menos contraperaltadas y la tracción mejor. Quizás no sea mejor piloto que antes de empezar el curso, pero ahora tengo la sensación de que los límites que antes tenía están ahora un poco más lejos, y que poco a poco, entrenando mucho, podré poner en practica lo que otros afortunados consiguieron asimilar en un día.
Tenía pensado entrenar a muerte en el nuevo circuito de Cedric Gracia de Vallnord donde se celebrará la próxima prueba de la Copa Catalana, pero el telesilla que sirve de remonte estuvo estropeado durante más de dos semanas. Para una vez que podía preparar una carrera a conciencia para sacar todo lo que doy de mí, un problema mecánico se interponía en mi camino. Me conformé con las pistas de GrandValira y las otras de Vallnord como pistas de entreno y adaptación a mi nueva bici. Al final, los dos últimos días de vacaciones/entrenos abrieron la pista y pude entrenar el susodicho circuito. Está bastante claro que no haré Top10, pero me voy bastante contento.
Nos vemos allí en Vallnord para la Copa Catalana, o aquí mismo con la crónica habitual... Disfrutar de las vacaciones mientras podais, o que os sea leve el retorno al trabajo!!!!

lunes, 6 de agosto de 2007

Que sólo sea una

No es lo mismo, pero aún estando con la mano enyesada, fui a la sexta prueba puntuable para la Copa Catalana de Descenso en Vilanova de Meià.

He de reconocer, que al contrario de lo que me pensaba, no sufrí mucho viendo a toda la gente bajar mientras yo estaba, por primera vez en toda la temporada, al otro lado de la cinta. Había conseguido llegar siempre a meta, en todas las mangas hasta que me caí a 100 metros de la llegada en Port Ainé, incluso contando el Campeonato de Catalunya, que competí con lo que al día siguiente se diagnosticaría como una fisura en el quinto metacarpiano. Espero que se me perdone haber incumplido aquella promesa de hacer todas las carreras esta temporada.

El circuito en sí es otra de las razones por lo que no lo pasé mal. Hacía un calor infernal, ya que el 70% del circuito era a pleno sol. Vilanova es una mezcla entre polvo y piedra suelta, que seguramente no echaré de menos en mi lista de descensos. Tenía un par de trazadas extrañas de aquellas en las que siempre me voy al suelo, y el resto del circuito era bastante peligroso, no por las trazadas en sí, sino porque cualquier salida de pista aseguraba un golpe en una piedra de tamaño considerable. Prueba de ello fue el accidente de Jose Carlos Bartolome que partió su casco y su nariz contra una piedra. Desde aquí le deseo una rápida recuperación. Accidentes como este u otros, me hacen pensar que era una buena opción descansar después de 2 carreras seguidas con accidente y lesión.

Todo lo que os puedo contar del circuito es lo poco que vi en la subida y bajada que hice a pie el Sábado a primera hora, y en las bajadas que estuve viendo el Domingo. Mi compañero Miguel, tampoco pudo competir, porque una caída el Sábado por la tarde no le dejaba doblar la pierna, y decidió no arriesgar en un circuito peligroso como este. Una vez más, y ya son demasiadas, SantuRacing se viene a casa sin el vídeo subjetivo del circuito... Ni siquiera pude grabar a la gente el Domingo como dije que iba a hacer, porque me llevé la única cinta llena que tengo, y hasta el último minuto que había era importante.

En resumen, un fiasco. No pude ir en bici, no grabe, pasé calor, y me dejé un dinero en viaje y alojamiento. Pero aún así me lo pasé bien. Empiezo a pensar que con lo malo que soy encima de la bici lo que más me gusta de esto es el ambiente, el llegar el Sábado por la mañana y empezar a saludar a los compañeros, comentar las trazadas, alucinar con los que bajan a toda leche y aprender cada día algo nuevo, aunque no sea subido a la bici.

Me esperan a partir del viernes dos semanas de vacaciones, que pasaré en Andorra con mis amigos y mi nueva bici, intentando acostumbrarme a ella, y aprendiendo un poco más. Asistiré al Camp de Oscar Saiz en GrandaValira, a ver si él es capaz de abrirme los ojos y enseñarme eso que me falta. A ver si esta semana os puedo poner alguna foto de mi nueva máquina, que como primera impresión es simplemente bestial.

Dividiré mis 2 semanas de vacaciones (con sus 3 fines de semana) entre Vallnord y GrandValira, e intentaré ir uno de cada dos días a la montaña a disfrutar del descenso. Si no nos vemos por allí, os espero en la siguiente prueba de Copa Catalana, en Vallnord otra vez (esperemos que no vuelva a llover...)