lunes, 6 de agosto de 2007

Que sólo sea una

No es lo mismo, pero aún estando con la mano enyesada, fui a la sexta prueba puntuable para la Copa Catalana de Descenso en Vilanova de Meià.

He de reconocer, que al contrario de lo que me pensaba, no sufrí mucho viendo a toda la gente bajar mientras yo estaba, por primera vez en toda la temporada, al otro lado de la cinta. Había conseguido llegar siempre a meta, en todas las mangas hasta que me caí a 100 metros de la llegada en Port Ainé, incluso contando el Campeonato de Catalunya, que competí con lo que al día siguiente se diagnosticaría como una fisura en el quinto metacarpiano. Espero que se me perdone haber incumplido aquella promesa de hacer todas las carreras esta temporada.

El circuito en sí es otra de las razones por lo que no lo pasé mal. Hacía un calor infernal, ya que el 70% del circuito era a pleno sol. Vilanova es una mezcla entre polvo y piedra suelta, que seguramente no echaré de menos en mi lista de descensos. Tenía un par de trazadas extrañas de aquellas en las que siempre me voy al suelo, y el resto del circuito era bastante peligroso, no por las trazadas en sí, sino porque cualquier salida de pista aseguraba un golpe en una piedra de tamaño considerable. Prueba de ello fue el accidente de Jose Carlos Bartolome que partió su casco y su nariz contra una piedra. Desde aquí le deseo una rápida recuperación. Accidentes como este u otros, me hacen pensar que era una buena opción descansar después de 2 carreras seguidas con accidente y lesión.

Todo lo que os puedo contar del circuito es lo poco que vi en la subida y bajada que hice a pie el Sábado a primera hora, y en las bajadas que estuve viendo el Domingo. Mi compañero Miguel, tampoco pudo competir, porque una caída el Sábado por la tarde no le dejaba doblar la pierna, y decidió no arriesgar en un circuito peligroso como este. Una vez más, y ya son demasiadas, SantuRacing se viene a casa sin el vídeo subjetivo del circuito... Ni siquiera pude grabar a la gente el Domingo como dije que iba a hacer, porque me llevé la única cinta llena que tengo, y hasta el último minuto que había era importante.

En resumen, un fiasco. No pude ir en bici, no grabe, pasé calor, y me dejé un dinero en viaje y alojamiento. Pero aún así me lo pasé bien. Empiezo a pensar que con lo malo que soy encima de la bici lo que más me gusta de esto es el ambiente, el llegar el Sábado por la mañana y empezar a saludar a los compañeros, comentar las trazadas, alucinar con los que bajan a toda leche y aprender cada día algo nuevo, aunque no sea subido a la bici.

Me esperan a partir del viernes dos semanas de vacaciones, que pasaré en Andorra con mis amigos y mi nueva bici, intentando acostumbrarme a ella, y aprendiendo un poco más. Asistiré al Camp de Oscar Saiz en GrandaValira, a ver si él es capaz de abrirme los ojos y enseñarme eso que me falta. A ver si esta semana os puedo poner alguna foto de mi nueva máquina, que como primera impresión es simplemente bestial.

Dividiré mis 2 semanas de vacaciones (con sus 3 fines de semana) entre Vallnord y GrandValira, e intentaré ir uno de cada dos días a la montaña a disfrutar del descenso. Si no nos vemos por allí, os espero en la siguiente prueba de Copa Catalana, en Vallnord otra vez (esperemos que no vuelva a llover...)

1 comentario:

Anónimo dijo...

Suerte en la recuperacion !! Caguen siempre espero un video helmet cam y nada xdd, y cual será tu proxima bici? la que llevas aora esta muy chula!