Cuando uno esta acostumbrado a la flora mediterránea en la que típicamente se ha estado moviendo durante todas las carreras del año, estar rodeado de helechos y eucaliptos en la montaña se hace extraño.
Galdakao, un circuito mítico, la prueba final del Open de España Maxxis. Os he contado alguna vez que Amelie (la película) no me gusto nada? Muchos de mis amigos me la recomendaron, la etiquetaron como una película especial, imprescindible. Me pareció horrorosa. Creo que me pasó lo mismo con este circuito. Me espera algo más. Sobretodo mejores remontes, pero también un trazado sin esos tramos inhumanos de pedaleo. El ambiente que se respiraba era impecable, así como unos dulces que daban en meta en la segunda manga, pero no estuvo a la altura de lo que me imaginaba.
La crónica de este fin de semana es sencilla. 5,5 horas de viaje el viernes al mediodía en solitario. 20 vueltas a Galdakao buscando el descenso y preguntando. Excursión a pie por el barrizal para reconocer el circuito. Entrenos el sábado medio barro medio húmedo. Carrera el domingo con un cansancio de la muerte. 6,5 horas el domingo de vuelta. Y todo para hacer lo de siempre, pero esta vez a 600 km de casa.
El circuito, en seco, debe ser genial. Una primera parte de curvas peraltadas y pequeños dobles entre ellas. Luego una empalmada relativamente larga que conseguí superar (no debe ser tan larga) y después de dos curvas un doble/meseta. Una zona de pedaleo, unas curvas, y un tramo plano/cuesta arriba totalmente encharcado. Otra zona de pedaleo, una pequeña pasarela para saltar un camino estrecho, y una zona de trialeras llenas de bumps. Para rematarlo, un salto de meta un tanto largo para mi gusto en el que mi bici se llevo mas de un tope...
Lo que si se portó fue el tiempo. No llovió en todo el tiempo que estuve en tierras bilbaínas. Si el barro que había de haber llovido por la semana ya me fastidió bastante, no me quiero imaginar que hubiera pasado si hubiera llovido.
No se si lo he comentado en este blog alguna vez, pero he llegado a la conclusión de que este deporte no es lo mío. Me lo paso muy bien (unas veces más que otras), y aprendo cada vez que salgo a la montaña, pero no es lo mío. En circuitos como este, donde se necesita una mezcla de técnica impecable y forma física contundente, es donde es más evidente. Soy malo, no se me da bien el barro, y llevo mucho tiempo sin ir al gimnasio. En este circuito el resultado es un tiempo pésimo.
Me levante el Domingo muy muy cansado. La última manga del Sábado fue horrible. Me caí varias veces, una de ellas haciendo un cortísimo en el doble/meseta que ya había pasado otras veces. El Domingo en la manga de calentamiento, me dí cuenta de que le había cogido miedo y preferí no arriesgar. Cuando llegué al primer tramo de pedaleo pensé que no llegaba abajo.
La primera manga fue un infierno. Sabía que me iban a doblar, y no tenía fuerzas para mover la bici como debía. La segunda fue un poco mejor, pero nada destacable. Creo que el mejor resumen de esta carrera es que no me lo pasé bien en ninguna de las dos mangas, aunque me voy contento de los entrenos y de haber sobrevivido a una empalmada que a principio de temporada me hubiera obligado a hacer la alternativa.
Los datos objetivos:
- Mi tiempo fue 4:31:253. La media de Senior fue 4:05:801.
- 40 de 45 en categoría Senior, un 11.36% de percentil.
- Mi velocidad equivale a un 72.03% de la de David Vazquez, ganador de la prueba.
- 127 de 167 en la clasificación Scratx, un 24.09% de percentil.
- La media de todos los participantes fue de 4:15:048.
La semana que viene sigue la Copa Catalana en el circuito de Fonteta, en tierras Gironines. Por lo que me cuentan volvemos a un circuito cuyo trazado, a priori, me favorece entre poco y nada. Trazadas poco marcadas, curvas muy cerradas, saltos, y puede ser que lluvia. Intentaré variar mi forma de entrenar a ver si puedo aprender a superar estos obstáculos que luego en carrera me suponen tantos segundos en el cronómetro.
Nos vemos por allí
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